Hasta la muerte es carroña para la política

Pocas veces he logrado viajar a Montañita, pero las veces que he ido he pasado rebacán, no por lo que la mayoría conoce sino porque tienes la oportunidad de toparte con gente de cualquier parte del mundo, sea hippies, hipsters u otros. También me gustó por ser un centro bastante conocido por los  surfistas (de hecho es ahí donde se han realizado algunos torneos importantes de este deporte).

Nuestra querida playa de Montañita se ve ahora empañada por la muerte de dos chicas extranjeras. El hecho que avivo muchas reacciones en los medios de comunicación y en las  redes sociales. La primera reacción normal es la compasión y empatía de todos, cosa normal. El segundo sentimiento, también normal, es el del miedo e inseguridad. Por su naturaleza propia, el miedo resulta ser un sentir de fácil manipulación y de esto se aprovecha fácilmente la gente involucrada en política.

Aquí las reacciones de algunos políticos 


Evidentemente la política se alimenta de esto porque es efectivo. El discurso de la inseguridad siempre será utilizado para pasar mensajes de fracaso de una sociedad, por otro lado permite ocultar o distraer avances que la misma sociedad ha logrado. Con la inseguridad, no solo hay víctimas mortales sino también victimas sociales, pues ahora por la irresponsabilidad de estos discursos, Montañita y Ecuador se ven estigmatizados.

Pero, ¿por qué solo pasa esto en Ecuador y no pasó esto en París cuando fue sede de atentados? O por qué no pasó en la propia Salta, Argentina, donde mataron a turistas francesas? a nadie se le ocurrió decir que París es la cuna del terrorismo sabiendo que los que cometieron dichos actos eran de nacionalidad francesa. A nadie se le ocurrió decir que Nueva York era inseguro cuando hubo el 9/11 y nadie estigmatizó a Salta cuando mataron a sangre fría a las francesas.

El problema en América Latina es que podemos vender hasta a nuestro país solo por politiquería. En Argentina existe la misma manipulación de este discurso del miedo o ¿acaso no recuerdan que Argentina era la mata de la inseguridad antes de las pasadas elecciones? Pasaron las votaciones y Argentina volvió a ser el país de paz que siempre ha sido y en los medios desaparecieron los crímenes de la primera plana.

Así mismo , el discurso que se construye trata de tapar y de hacernos olvidar que se ha logrado desarticular 893 bandas, que se logró reducir de manera histórica la tasa de homicidios que pasaba de 18 casos por cada 100 mil habitantes en 2006, decayendo el año pasado a 8,15 muertes violentas por cada 100 mil ciudadanos. Se intenta ocultar que en Ecuador se ha dignificado la labor del policía aumentando sus sueldos, teniendo así la fuerza pública mejor pagada de la región. Pero más importante que potencializar a la policía, para garantizar un ambiente de paz está el énfasis que se pone en la política social, que finalmente es el mejor remedio contra el crimen.

Sin embargo seguimos luchando contra corriente. Poco se puede hacer en una sociedad donde hablar de solidaridad o de bien común es remplazado por “hay que abrirnos al mundo” “se está destruyendo al empresariado” o “debemos generar más competitividad”. ¿Qué se puede hacer cuando en un país donde se trata de redistribuir la riqueza se lo responde con marchas de lo más violentas?

En definitiva estos casos siguen demostrando una vez más la bajeza con la que se maneja la política. Lo bueno es que a pesar de la irresponsabilidad, Montañita seguirá siendo lo que es y seguiremos visitándola  nacionales y extranjeros para fumarnos lo que se nos antoje o para surfear unas buenas olas, disfrutando un poco de la vida. 

Leo Fajardo